En un paso clave para el desarrollo humano, se firmó un acuerdo que unirá el arte y la espiritualidad, con proyección al futuro.
Representantes de las entidades luego de la firma del convenio. (Fotografía: Facebook Arzobispado de Asunción)
El Instituto Superior de Bellas Artes (ISBA) y la Arquidiócesis de la Santísima Asunción firmaron, en la mañana de hoy, un convenio interinstitucional de cooperación académica y cultural en el seminario metropolitano. Este acuerdo tiene como objetivo central fomentar el desarrollo de proyectos conjuntos que fortalezcan el ámbito artístico y espiritual de Paraguay.
Un Acuerdo para el Futuro
El convenio firmado entre estas dos instituciones clave busca unir esfuerzos en materia académica, científica, tecnológica y cultural. La colaboración tiene un alcance amplio, desde la implementación de programas educativos hasta la organización de proyectos que ayuden a la preservación del patrimonio cultural y religioso del país.
Este acuerdo será el pilar de futuros programas que busquen la integración del arte con el humanismo y la fe, resaltando la importancia de fomentar valores cristianos a través de la educación artística.
Momento de la firma del convenio. (Fotografía: Facebook del Arzobispado de Asunción)
La Importancia de la Educación Artística
El arte tiene el poder de transformar realidades, y en un contexto donde la espiritualidad y la cultura parecen alejarse en muchos ámbitos, este convenio busca justamente lo contrario: acercar ambas dimensiones en un espacio común. La presencia del ISBA en este acuerdo aporta la excelencia en la formación artística, mientras que la Arquidiócesis contribuye con una mirada profunda hacia el sentido espiritual del ser humano.
Un Futuro Brillante para el Arte y la Fe
La firma de este convenio, del que participaron el cardenal Adalberto Martínez, Osvaldo Ramón Olivera Villagra (director General del ISBA), Jorge Ramírez (director de Convenio y Protocolo del ISBA), pbro. Hugo Fernández (director del Museo Eclesiástico "Monseñor Bogarín") y Juan Carlos Romero (asesor jurídico de la arquidiócesis de Asunción); es una señal clara de que tanto el arte como la religión pueden y deben trabajar de la mano para la construcción de una sociedad más justa y humana. En un mundo que se mueve rápidamente, donde el consumo y lo inmediato parecen dominar la escena, iniciativas como esta nos recuerdan que el arte, en su esencia, es una vía para elevar el espíritu y acercarnos a lo trascendental.
La educación artística, reforzada por la espiritualidad, se erige como una herramienta poderosa para el desarrollo integral del ser humano. El camino recién comienza, pero ya se vislumbran grandes frutos para la cultura paraguaya.
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