Fratelli tutti: la encíclica que cambió el rumbo del diálogo religioso cumple 5 años
- Canal Vida
- 3 oct
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Hace cinco años, el Papa Francisco firmaba en Asís una encíclica que sacudió al mundo: Fratelli tutti. Hoy, León XIV recuerda su vigencia. ¿Es posible la fraternidad universal en un planeta dividido por guerras, odios y fronteras?
Pasaron cinco años desde aquel histórico 3 de octubre de 2020, cuando el Papa Francisco, en Asís, firmó la encíclica Fratelli tutti, un documento que sacudió la conciencia mundial con un llamado radical: todos somos hermanos. El lugar no fue casual. Allí, en la tierra de san Francisco, el Pontífice quiso sellar un mensaje que trascendiera fronteras, religiones y culturas.
EL DOCUMENTO QUE ROMPIÓ ESQUEMAS
Fratelli tutti no fue solo una encíclica. Fue, para muchos, una verdadera “carta magna de la fraternidad”.
Francisco se inspiró en san Francisco de Asís y en el Documento sobre la Fraternidad Humana, firmado un año antes en Abu Dabi con el gran imán Ahmad Al-Tayyeb. La encíclica recogía una urgencia: detener la espiral de odio, divisiones y guerras culturales que desgarran a la humanidad.
CINCO AÑOS DESPUÉS: ¿QUÉ QUEDÓ?
Hoy, al cumplirse un lustro, el cardenal George Jacob Koovakad, prefecto del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso, recuerda cómo Fratelli tutti se convirtió en semilla de proyectos académicos, foros interreligiosos y espacios de reflexión en todo el planeta. Incluso fue citada en la India, donde los obispos habían lanzado un documento sobre los desafíos de la fraternidad, que inspiró al propio Francisco.
El gran imán Nasaruddin Umar, desde Indonesia, también lo recordó en 2024, vinculando sus enseñanzas con el principio islámico de ukhuwah insaniyah: la fraternidad humana universal.
UN CLAMOR QUE SIGUE VIGENTE
Francisco advirtió que el mundo no necesita muros, sino puentes. Que no se puede hablar de paz mientras se excluye al pobre, al migrante, al descartado. Y que la fe sin fraternidad es religión vacía.
Hoy, cuando la polarización política, la guerra y el individualismo parecen crecer, Fratelli tutti suena más actual que nunca. Su mensaje —que “nadie se salva solo”— resuena como profecía y como desafío.
Cinco años después, el eco de Asís sigue vivo. El grito de Francisco aún nos incomoda y nos invita a elegir: ¿viviremos como extraños en la misma casa… o como verdaderos hermanos bajo un mismo Padre?
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