Alarma en el Vaticano: nueva crisis respiratoria del Papa Francisco
- Canal Vida
- 28 feb
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El Pontífice sufrió un ataque de broncoespasmo y debió ser sometido a ventilación mecánica no invasiva. Su estado de salud se deterioró y el pronóstico sigue siendo reservado.

La preocupación por la salud del Papa Francisco volvió a intensificarse en las últimas horas tras la confirmación de un episodio de broncoespasmo que derivó en un repentino empeoramiento de su cuadro respiratorio. Según el último parte médico de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el Pontífice, hospitalizado desde hace 14 días en el Policlínico Gemelli, presentó una crisis que requirió una rápida intervención médica.
🗣️ "El Santo Padre fue prontamente aspirado y se inició ventilación mecánica no invasiva, con buena respuesta en el intercambio gaseoso. Siempre alerta y consciente, colaboró en las maniobras terapéuticas."
Sin embargo, el parte médico no trae tranquilidad. A pesar de la estabilidad lograda tras la intervención, el pronóstico de Francisco sigue siendo reservado.

Un día marcado por la oración y la lucha
Hasta el episodio, la jornada del Papa había transcurrido entre la fisioterapia respiratoria y momentos de oración en la capilla de su apartamento privado en el hospital. Pero la repentina crisis de broncoespasmo generó un cuadro de vómitos con inhalación, provocando la desestabilización de su salud.
El equipo médico mantiene un seguimiento estricto y continúa administrando la terapia prescrita. Aunque el Pontífice muestra signos de resistencia física y espiritual, la incertidumbre persiste.

Oraciones y pedidos por su recuperación
El deterioro en la salud del Papa generó una ola de cadenas de oración en todo el mundo. En la plaza San Pedro, cientos de fieles se reunieron nuevamente para pedir por su recuperación.
💬 "Que la Virgen María, Madre de la Iglesia, sostenga al Papa en este momento de dificultad", expresó el cardenal Baldo Reina, quien presidió el rezo del Rosario en su nombre.
La Iglesia y el mundo católico permanecen en vilo. Mientras el Papa Francisco enfrenta esta nueva prueba, millones de fieles elevan sus plegarias en espera de su pronta recuperación.
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