El equipo de fútbol del Real Madrid le agradeció a la Virgen de la Almudena por los dos torneos ganados. Historia de la Patrona de la capital española.
Marcelo, junto a otros compañeros, deja una ofrenda floral a los pies de Santa María la Real de la Almudena. (Fotografía: Facebook Arquidiócesis de Madrid)
Pasado un día de conseguir la décimo cuarta Champions League el equipo de fútbol del Real Madrid se acercó hasta la catedral de la Virgen de la Almudena, en la capital española, para agradecerle y ofrecerle a María dicho trofeo y el de la Liga local obtenido el 30 de abril.
El combinado “merengue” que el sábado 28 obtuvo la tan ansiada “orejona” al vencer en París (Francia) al Liverpool por 1 a 0, con gol del brasilero Vinícius; el domingo, apenas arribado a España, llegaron a la catedral donde los recibió el arzobispo de Madrid cardenal Carlos Osoro, que saludó a cada uno de los jugadores e integrantes de la delegación.
El cardenal Carlos Osoro saluda a Karim Benzema (anteojos) y Marcelo, quienes le muestran el trofeo de la Champions League. (Fotografía: Facebook Arquidiócesis de Madrid)
AGRADECER, UNA TRADICIÓN
Brindar los títulos obtenidos a la Patrona de la capital española es una tradición que se remonta al siglo XX, y que se perdió en los últimos dos años a causa de la pandemia.
Por ello el purpurado agradeció la presencia, retomar la tradición, y señaló que “el Real Madrid es la cultura del encuentro, del equipo”, y destacó que llevan el nombre de Madrid a cada rincón del mundo, tal como lo hizo san Isidro, “un hombre sencillo con presencias en todos los continentes”, a quien se recuerda en este Año Santo.
“Es estimulante compartir un camino con los demás, apoyarnos mutuamente en la búsqueda del éxito”, indicó el cardenal Osoro.
FORJADOS EN VALORES
El equipo campeón de la Champions League, dirigentes del Real Madrid y el clero de Madrid junto a los trofeos obtenidos en el año. (Fotografía: Facebook Real Madrid)
El presidente de la entidad madridista, Florentino Pérez, en la breve ceremonia en el templo dedicado a la Madre agradeció al cardenal por recibirlos y aseveró que el equipo se concibió “en valores como el esfuerzo, la superación, la humildad; y es una referencia para millones de personas y ejemplo para los niños”.
Luego el exfutbolista de la selección española Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del Real Madrid, leyó unas peticiones de los jugadores, una de ellas pidió para que los presentes experimenten “la protección maternal de la Virgen María”.
LA VIRGEN DE MADRID
Imagen entronizada en la catedral Santa María la Real de la Almudena.
Hay antiguas leyendas y tradiciones que girar en torno a los orígenes de la devoción a santa María Real de la Almudena, patrona de Madrid.
Una de ellas la narró el jesuita Jerónimo Román de la Higuera (1538-1611) que indicó que “cuando el apóstol Santiago vino de Jerusalén a predicar a España, trajo la milagrosísima imagen que hoy llaman de la Almudena a esta Coronada Villa de Madrid.. Es la primera que adornó esta villa y, por la misma tradición, se afirma que fue labrada viviendo Nuestra Señora, por san Nicodemus y colorida por san Lucas”.
Otros autores como Iván de Vera Tassis, Lope de Vega, Alonso Liborio Santos, García Nieto y Timoteo Domingo Palacio sostienen también esta tradición.
Merece la pena destacar, la existencia de una placa de bronce anónima que data de 1616 donde se recogen estos mismos orígenes de la devoción. Y existen un lienzo anónimo del siglo XVIII y un grabado de Franciscus Ignacius Ruíz de la misma centuria, que ilustran la mencionada tradición.
Interior de la actual catedral dedicada a la Patrona de Madrid.
Varios siglos más acá, con la llegada de los musulmanes a la zona en el año 702 y, ante el temor de que la imagen fuera profanada por los invasores, decidieron esconderla en el interior de un cubo de la muralla, con dos cirios encendidos.
Pasaron más de tres siglos, y tras la conquista de la ciudad por tropas cristianas, el rey Alfonso VI, que conocía la historia de la Virgen escondida, en 1083 ordenó buscarla, pero sin resultados positivos.
El no poder encontrar a María impacientaba mucho al rey, que entonces prometió que si lograba reconquistar Toledo, intensificaría la búsqueda de la Virgen.
Tras la victoria, el mismo rey se dedicó a buscar a la Madre organizando una solemne procesión alrededor de la muralla madrileña.
El 9 de noviembre de 1085, al pasar por el cubo de la muralla, un gran trozo de ella se desprendió y bajo la misma apareció la imagen de la Virgen. A partir de entonces, Santa María de la Vega —como se la conocía hasta ese momento—, pasó a ser la Virgen de la Almudena, por haber sido hallada en la ciudadela de la ciudad, la almudayna en árabe.
Con el beneplácito del Alfonso VI se convirtió en Santa María la Real de la Almudena, y se convirtió en la patrona de Madrid.
Después de varios siglos, en 1646 el Concejo de Madrid decidió tras las inundaciones que sufrió la ciudad hacer una rogativa a la Virgen para que cesen las lluvias. Desde entonces, la comuna madrileña asiste todos los años a su fiesta.
Catedral Santa María la Real de Almudena.
La imagen, a los largo de los años, fue cambiando de ubicaciones: estuvo en la parroquia Santa María, iglesia del Sacramento y en 1911, la cripta de la catedral. Después de la guerra, volvió a la iglesia del Sacramento, y más tarde a la entonces catedral de San Isidro.
El Papa Pablo VI en 1977 la declaró Patrona principal de la arquidiócesis de Madrid, por lo que bajo su advocación se construyó la catedral Santa María la Real de la Almudena, donde fue entronizada en 1993.
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