top of page
  • Foto del escritorCanal Vida

El Papa pide tratar con dignidad a los presos

El Santo Padre en su viaje a Baréin pidió por un trato digno a los privados de su libertad y la abolición de la pena de muerte. “Se debe garantizar el derecho a la vida, incluso para los que están siendo castigados, cuyas vidas no deben ser arrebatadas”, subrayó.
 

El Papa Francisco visitó Baréin del 3 al 6 de noviembre.


Francisco cerró el domingo 6 de noviembre el primer viaje papal de la historia a Baréin con ánimos a sacerdotes y monjas para que continuaran sirviendo a la pequeña congregación católica del reino del Golfo Pérsico. Mencionó en concreto a sus prisioneros, y dijo que “según cómo se trate a los últimos es como se mide la dignidad y la esperanza de una sociedad”.


El Santo Padre volvió a plantear la situación de los prisioneros en un país con la pena capital y donde cientos de personas fueron detenidas de forma violenta en la Primavera Árabe de 2011, con ayuda de los vecinos Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí.


El Pontífice elogió la labor en cárceles de algunas monjas carmelitas católicas durante una reunión con clérigos y religiosas en la iglesia del Sagrado Corazón en la capital, Manama.

 
 

DIGNIFICAR A LAS PERSONAS

El Obispo de Roma agradeció a las religiosas por el trabajo que realizan con reos e indicó que cuando esta con prisioneros siempre se pregunta “por qué ellos y no yo”.


"Hacerse cargo de los detenidos nos ayuda a todos, como comunidad humana, porque según cómo se trate a los últimos es como se mide la dignidad y la esperanza de una sociedad, dijo.


Francisco mantiene desde hace tiempo una labor en prisiones y mantiene el contacto con reos a los que conoció cuando era arzobispo en Buenos Aires. A menudo visita penales durante sus viajes al extranjero y celebró liturgias del Jueves Santo con presos de Roma, aunque no se programaron encuentros similares durante su estancia en Bahréin.

 
 

CONDENADOS A MUERTE

El gobierno bareiní afirmó que respeta los derechos humanos y la libertad de expresión, y que su sistema de justicia penal cumple el derecho internacional. Sin embargo, grupos activistas condenaron de forma reiterada las condiciones de los penales y los presos en la campaña de represión de disidencia iniciada hace años en la isla.


Según el Instituto de Baréin para los Derechos y la Democracia, el país puso fin en 2017 a una moratoria de facto a la pena de muerte y ejecutó a seis reos desde entonces. La entidad y Human Rights Watch documentó un “drástico aumento” en el número de condenas de muerte impuestas desde 2011. En este momento hay 26 personas condenadas a muerte, la mitad por actividad política.

 
 

A su llegada a Baréin el jueves 3, Francisco pidió a las autoridades que evitaran recurrir a la pena de muerte y aseguraran que se garantizan los derechos humanos fundamentales a todos los ciudadanos.


El sucesor de Pedro elogió la tradición de tolerancia de Baréin y citó la constitución de la nación, que prohíbe la discriminación por motivos de religión, como un compromiso declarado que debe ponerse en práctica. Hacerlo, afirmó, garantizaría “que se reconozca concretamente la igualdad de dignidad y oportunidades para cada grupo y para cada individuo; que no existen formas de discriminación y que no se violan los derechos humanos fundamentales, sino que se promueven”.

Refiriéndose a la pena de muerte, declaró que el gobierno debe garantizar ante todo el derecho a la vida, y “la necesidad de garantizar ese derecho siempre, incluso para los que están siendo castigados, cuyas vidas no deben ser arrebatadas”.

Comments


bottom of page