El Papa se solidarizó con las víctimas del tiroteo en los Estados Unidos mientras celebraban el Día de la Independencia.
“Sanación y consuelo a los heridos y afligidos”, pidió Francisco en una misiva enviada al Arzobispado de Chicago (Estados Unidos) por el tiroteo ocurrido ayer en el desfile del Día de la Independencia.
El Pontífice exhortó a rechazar la violencia y respetar la vida al expresar su duelo por los muertos durante un “tiroteo sin sentido” en los suburbios de Chicago.
En el telegrama, firmado por el secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Pietro Parolin, el vicario de Cristo manifestó que reza por las seis víctimas fatales, rechazó la violencia “en todas sus formas” y pidió “respetar la vida en todas sus etapas”.
Desde una azotea en el suburbio de Highland Park en Chicago, un hombre abrió fuego contra la multitud que presenciaba el desfile, matando a seis personas e hiriendo a 30. La policía detuvo a un sospechoso, pero no mencionó el motivo.