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El Papa León XIV Sacude a la Ciencia: ‘La Medicina Nació Para Defender la Vida, No Para Jugar Con Ella’

  • Foto del escritor: Canal Vida
    Canal Vida
  • hace 9 minutos
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El Papa León XIV lanzó un mensaje que sacudió al mundo médico: la ciencia debe volver a servir a la vida y no al poder. Directo, incómodo y revelador, pidió que los avances lleguen también a los pobres y llamó a “venerar cada corazón”.
Papa León XIV
El Papa León saluda a la delegación del "Paris Course on Revascularization".

En el Vaticano, ante una delegación de élite de cardiólogos del Paris Course on Revascularization, León XIV lanzó una de las frases más fuertes de su pontificado: “Cada corazón que ustedes tocan es un recordatorio de que la vida es un don sagrado… y no se negocia”.


La presencia de los mejores especialistas del mundo no impidió que el Pontífice hablara con crudeza y claridad: el médico moderno —rodeado de tecnología, presión y dilemas éticos— “se encuentra en una encrucijada entre ciencia, compasión y responsabilidad moral”.

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EL GOLPE DEL PONTÍFICE: LA MEDICINA DEBE SERVIR A LA VIDA, NO AL PODER

Con un tono solemne, León XIV recordó algo que muchos olvidan en los laboratorios y salas de intervención: La medicina no nació para ser negocio, ni laboratorio de eugenesia, ni instrumento de descarte. Nació —dijo— “para continuar la ternura de Cristo hacia los enfermos”.


Y agregó, mirando a los cardiólogos casi como quien mira un ejército en primera línea: “Su misión no es sólo reparar un órgano… es preservar el misterio de la vida humana”.

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CIENCIA SIN CORAZÓN = OSCURIDAD

El Pontífice fue más allá: aplaudió la investigación científica, pero lanzó una advertencia que corrió como fuego entre los presentes. La ciencia —dijo— “abre al ser humano a la verdad y al servicio del bien común… siempre y cuando no se olvide del corazón de los pobres”.


Porque para León XIV, los avances médicos que sólo disfrutan los ricos son una traición al Evangelio: “Los nuevos tratamientos deben llegar también a los marginados. Si no, no son progreso: son privilegio”.



CONFIADOS AL SAGRADO CORAZÓN

Antes de despedirlos, el Papa depositó su misión en manos del Sagrado Corazón de Jesús: “Que Él los sostenga con valentía, perseverancia y alegría. Ustedes son custodios de la vida”.


Un mensaje directo, incómodo para algunos… pero absolutamente luminoso para un mundo que sigue buscando un corazón que lo salve.



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