El millennial deberá esperar

La muerte del Papa Francisco obligó a suspender la canonización de Carlo Acutis, el beato adolescente que iba a ser declarado santo en plena Pascua. El mundo joven católico queda en pausa, pero su legado sigue latiendo.

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Era una de las fechas más esperadas del Jubileo 2025. La Iglesia se preparaba para canonizar al joven Carlo Acutis, el adolescente italiano conocido como “el influencer de Dios”, cuya vida digital y fervor eucarístico lo convirtieron en un símbolo de la fe en tiempos de redes sociales. Pero todo cambió con el fallecimiento del Papa Francisco.

Este lunes 21, la Oficina de Prensa de la Santa Sede anunció que, debido a la muerte del Santo Padre, “quedan suspendidos la celebración eucarística y el rito de canonización del Beato Carlo Acutis, previstos para el 27 de abril”. La ceremonia iba a realizarse en el Segundo Domingo de Pascua, conocido como el de la Divina Misericordia, y en el marco del Jubileo de los Adolescentes.

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El repentino fallecimiento del pontífice obligó a detener el proceso litúrgico, ya que la Sede Apostólica entra en período de sede vacante, y toda actividad oficial de la Iglesia Universal queda sujeta a las decisiones del Colegio de Cardenales.

La noticia cayó como un balde de agua fría para miles de jóvenes peregrinos que se preparaban para participar del evento. Carlo Acutis, fallecido en 2006 a los 15 años, se había convertido en una figura querida por católicos de todo el mundo. Su canonización hubiera sido la primera de un joven nacido en el siglo XXI.

Pero ahora, el “santo de los millennials” deberá seguir esperando. Su historia, sin embargo, sigue viva, latiendo en cada altar donde se adora la Eucaristía, en cada joven que reza frente a una pantalla, y en cada corazón que cree que la santidad no es cosa del pasado.

La espera continúa. El cielo, sin embargo, ya lo celebra.