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Benedicto XVI: “Señor, te amo”

Joseph Ratzinger, sus últimos minutos previos al deceso, y el amor inconmensurable a Dios.
 

Benedicto XVI en todo momento mostró su gran amor a Dios y la Iglesia.


Tres de la madrugada. 31 de diciembre. Joseph Ratzinger en sus horas previas al encuentro con Dios, antes del momento de entrar en agonía, estaba en la habitación con un enfermero que lo asistía que escuchó de la boca del papa emérito, con una voz suave y débil, la frase: “¡Señor, te amo!”.


El arzobispo Georg Gänswein relató esta escena de amor y entrega de Benedicto XVI hacía Dios, e indicó que las palabras pronunciadas son un resumen de su vida, de su preparación para el encuentro definitivo, cara a cara, con el Señor.

 
 
RENACER A LA VIDA ETERNA

El 28 de junio de 2016, en el 65 aniversario de la ordenación sacerdotal de Benedicto XVI, Francisco hizo una semblanza sobre la larga trayectoria sacerdotal de Ratzinger y dijo: "en una de las muchas y hermosas páginas que dedica al sacerdocio, subraya cómo, en la hora de la llamada definitiva de Simón, Jesús, mirándole, le pregunta una cosa: ¿Me amas?. ¡Qué hermoso y cierto es esto! Porque es aquí, nos dice, en ese '¿me amas?' donde el Señor funda el pastoreo, porque sólo si hay amor al Señor puede Él pastorear a través de nosotros...: 'Señor, tú lo sabes todo, tú sabes que te amo'".

 
 

"Esta es la nota -continuó Francisco- que domina toda una vida gastada en el servicio sacerdotal y en la teología, que ella no por casualidad definió como 'la búsqueda del amado'; esto es lo que ella siempre testimonió y todavía testimonia hoy: que lo decisivo en nuestros días -de sol o de lluvia-, lo único que une todo lo demás, es que el Señor esté verdaderamente presente, que lo deseemos, que interiormente estemos cerca de Él, que lo amemos, que creamos de verdad profundamente en Él y creyendo amarlo de verdad. Es este amar lo que verdaderamente llena nuestro corazón, este creer es lo que nos hace caminar seguros y tranquilos sobre las aguas, incluso en medio de la tempestad, como le ocurrió a Pedro".

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